
El presidente Barack Obama realizó este jueves una visita a la ciudad de Nueva Orleans, a la que calificó como un ejemplo de superación para todo el país.
Ya hacen 10 años que el huracán Katrina golpeó Nueva Orleans, por este motivo, el presidente Barack Obama realizó este jueves una visita a la ciudad, a la que calificó como un ejemplo de superación para todo el país al reconocer sus logros para recuperarse de aquel desastre natural sin precedentes.
Según información reseñada por agencias internacionales, el Presidente consideró como «única» la recuperación experimentada por Nueva Orleans, cuyo éxito atribuyó a los esfuerzos conjuntos de sus vecinos, los gobiernos locales y el apoyo federal.
Obama reivindicó la «extraordinaria resiliencia» de sus habitantes «enfrentándose a la tragedia», en la que fallecieron alrededor de 1.800 personas, y aplaudió cómo ha sido capaz de volver a ser «incluso mejor que antes».
El mandatario también señaló que todavía hay cosas pendientes por resolver, especialmente en las zonas más pobres.
«La tormenta dejó al descubierto otra tragedia que había estado gestándose durante décadas», afirmó.
«Nueva Orleans ha estado durante mucho tiempo plagada por una desigualdad estructural que dejó a mucha gente, especialmente a los pobres y a las personas de color, sin puestos de trabajo de calidad o una cobertura sanitaria asequible o una vivienda digna», señaló Obama.
«Demasiados niños crecieron rodeados de delitos violentos, y asistían a escuelas de baja calidad donde pocos tenían una oportunidad de salir de la pobreza. Y así, como contra un cuerpo ya débil y desnutrido, la tormenta golpeó», continuó el Presidente.
Obama enfatizó que si Nueva Orleans fue ejemplo así de lo que ocurre cuando el Estado falla, su recuperación también lo ha convertido en un ejemplo de lo que puede lograrse cuando éste funciona.